INTERIM MANAGEMENT

SUCESIÓN EMPRESA FAMILIAR

Uno de los retos más importantes a los que se enfrenta cualquier empresa familiar (que son el 92% en nuestro país) es el momento del relevo generacional.

La figura del Interim Manager sirve de puente entre las diferentes generaciones, permitiendo al mismo tiempo la puesta al día de la cultura de la empresa, la profesionalización de la dirección y la transformación digital.

El Interim Manager lleva a cabo el proceso de transformación al tiempo que acompaña al sucesor en su desarrollo y consolidación como nuevo líder.

Las diferentes situaciones

01

El fundador aguanta hasta el último momento sin preparar el relevo.

Suele ser un perfil que delega poco y que actúa directamente en todas las áreas de la empresa. Cuando finalmente llega el momento de retirarse no hay un sucesor preparado para tomar las riendas y el proceso suele resultar traumático.

02

Se elige un sucesor entre las opciones disponibles en la familia.

Que sea de la familia no significa que sea la persona adecuada. En estos casos puede ocurrir que el sucesor permanezca siempre a la sombra del fundador y todo el mundo se acostumbre a que no tome decisiones importantes.

03

El fundador deja la empresa a cargo de sus hijos, sin haberse designado un sucesor.

En estos casos la situación es aún peor porque las decisiones se deben tomar conjuntamente y aparecen varias cabezas al frente de la empresa, en la que solo hay sitio para una persona. A nivel operativo y de liderazgo suele ser nefasto. 

Una misión de relevo generacional puede ocupar en 1 y 2 años, en función del estado de desarrollo de la compañía y de su madurez como empresa familiar.

La situación ideal

En primer lugar, hay que considerar un horizonte de entre 3 y 5 años para preparar la sucesión.

La propiedad de la empresa tiene que designar un sucesor llevando a cabo un proceso en el que se tengan en cuenta los requisitos mínimos del candidato, valorando además las habilidades y competencias más adecuadas para el puesto.

Una vez elegido el sucesor es conveniente que empiece conociendo la empresa desde abajo, recorriendo diferentes departamentos para entrar en contacto con toda la cadena de valor de la compañía.

Después, con el fin de adquirir experiencia y una visión más amplia del mercado se recomienda que trabaje en otra empresa, e incluso en otro país si la empresa lleva a cabo negocios internacionales.

De esta forma, además de esa visión externa que le permite volver a la empresa con frescura y objetividad, se evita que el sucesor haya estado a la sombra del fundador.

En estos procesos de relevo generacional, tan importantes para el futuro de las empresas, hay que prestar especial atención a la Cultura Empresarial. El momento de la sucesión puede ser adecuado para revisarla y ponerla al día.

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